“Las clínicas me dieron un avance significativo, fueron una bisagra en mi. Ya había realizado recorridos de 100 km y pensaba que sabia casi todo. Gran error, aprendí que era realmente hacer senderismo, ascensos, descensos, técnicas de frenado, la altura correcta del asiento y el porque, al igual que la importancia de tener el cuadro conforme a la estatura y mucho mas…
Los instructores contagian con su entusiasmo al explicarnos. Eso es fundamental porque nos suben al máximo las ganas, ponen todo para que las cosas salgan bien, y se logra el objetivo siempre.
Si queres aprender realmente de MTB no podes dejar de asistir a las clínicas.”